viernes, 5 de julio de 2013

Daniel Cecchini y Jorge Déboli expusieron sobre lo estratégico de recuperar Papel Prensa

Inició el Ciclo de Aportes para Pensar la Profundización en Comunicación 


El Frente de Graduados y Trabajadores Comunicación Patria Grande, agrupados en CONAPLA, lanzó el pasado miércoles 3 de julio el Ciclo de Aportes para Pensar la Profundización en Comunicación en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata.

La primera charla del ciclo, que se desarrollará a lo largo del año, llevó por título “De la apropiación y el monopolio mediático hacia el desarrollo de medios populares: Lo estratégico de recuperar Papel Prensa”, y contó con las exposiciones de Daniel Cecchini, Director periodístico de Miradas al Sur y coautor del libro “Silencio por Sangre. La verdadera historia de Papel Prensa”, y Jorge Déboli, Secretario de la Comisión Federal Asesora, creada por ley para el control del papel para diario, Director de la Agencia federal de noticias INFOGEI y Vicepresidente Ejecutivo de la Cámara de Diarios y Periódicos Pymes de la Provincia de Buenos Aires (CADyPBA).

Con el objetivo de profundizar el debate acerca de la comunicación en Argentina y la región, la situación de los trabajadores del área y, puntualmente, el caso Papel Prensa, Cecchini y Déboli trazaron un recorrido histórico que aportó a comprender cómo el terrorismo de Estado perpetrado por la última dictadura cívico-militar y los medios gráficos hegemónicos de aquel entonces, La Nación, Clarín y La Razón, erigieron y consolidaron “el imperio mediático que actualmente maneja la agenda periodística a lo largo y ancho del país”, a partir de la apropiación y compra extorsiva a precio vil de la única empresa nacional productora de papel de diario.

Tanto Cecchini como Déboli destacaron la continuidad ininterrumpida del proceso de monopolización de la información en Argentina desde 1976 hasta la actualidad, y subrayaron la necesidad de profundizar la organización de los actores del campo de la comunicación en su conjunto para avanzar en la conquista de derechos, tales como la aplicación efectiva de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, la sanción de la Ley de Fomento para la Producción Independiente y Autogestiva de Comunicación Cultural por medios gráficos y de Internet, y la recuperación de las acciones de Papel Prensa a manos del Estado.

De la charla participaron estudiantes y trabajadores de medios gráficos y digitales, entre ellos, La Garganta Poderosa, Realpolitik y El Tranvía, quienes compartieron sus experiencias y su apoyo al desarrollo de los medios comunitarios y populares, que permitan potenciar una comunicación que exprese cada vez más los intereses del pueblo. El encuentro, además, contó con la presencia de estudiantes del Programa FINES 2 del Centro Educativo Arturo Jauretche, cuya sede funciona en el Galpón Cultural El Conventillo, ubicado en calle 63 entre 23 y 24.

El Ciclo de Aportes para Pensar la Profundización en Comunicación continuará con otras charlas y encuentros, destinados especialmente a los trabajadores de la comunicación, el periodismo, la investigación y la docencia, con el objetivo estratégico de debatir y avanzar hacia la consolidación de un nuevo modelo de comunicación al servicio de las mayorías populares.
 


viernes, 28 de junio de 2013

¿En dónde está parada la comunicación?

¿En dónde está parada la comunicación?
Junio es el mes del día del periodista. Este año, encuentró al colectivo de la comunicación en la lucha por las paritarias prensa 2013 y también, parte de él, en la búsqueda de la Ley de Fomento para la Producción Independiente y Autogestiva de Comunicación Cultural por medios gráficos y de Internet, también conocida como la ley de medios gráficos, que está siendo impulsada  por la Asociación de Revistas Culturales Independientes (AReCIA).
En un ciclo donde el debate por las diversas democratizaciones está en auge, cabe destacar que la democratización de la comunicación es una de las ramas más debatidas y en discusión, los pasos que ha dado en estos últimos años han sido enormes. Sin embargo, debe tenerse en claro que las leyes no son suficientes, tal es el ejemplo de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA), sancionada en 2009. Tal es el ejemplo, también, que en tanto los grandes grupos económicos –que fueron beneficiados durante los procesos más duros del neoliberalismo- no desinviertan lo pautado por la ley, la plena aplicación no podrá efectivizarse.
Desde la vigencia de la denominada ley de medios, de televisión y radio, del total de licencias que se autorizaron, el 78,7% corresponde al sector privado y el 21,3% al sector público estatal y no estatal. Todas vía adjudicación directa. No puede decirse esto sin recordar que la ley prevé un 33% de licencias para el sector privado, un 33% para el Estado y un 33% para organizaciones sin fines de lucro. Estas últimas son las que más obstáculos tienen, ya que son las principales afectadas por los grandes intereses económicos, recordemos, el espectro radial y televisivo –quitando a la Televisión Digital, otro gran avance- es finito  y no infinito. Nadie dijo que sería fácil culminar con tantos años de beneficios a los sectores privados concentrados y mucho menos que la aplicación de las normativas serían instantáneas. Es por ello que debe tenerse muy en claro que la lucha por esta ley no quedó en la sanción de ésta el 10 de octubre de 2009, sino que se trata de una álgida batalla que hay que continuar.
Ahora, si de batallas de la comunicación hablamos no nos podemos limitar a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual; hay dos aspectos más a desglosar. Los trabajadores de la prensa escrita están reclamando las "Paritarias Prensa 2013". ¿Por qué? Por el estancamiento de las negociaciones paritarias, que por primera vez en 38 años, se están llevando a cabo. El principal reclamo es que las empresas quieren imponer un techo de 24% de aumento en tres cuotas, lo que implica un máximo de 18% anual, mientras que lo que exigen los trabajadores es un 35% de aumento, con un mínimo de 7000 pesos de básico y 1000 por colaboración. El reclamo, entonces, va también por la dignificación del empleo, no es desconocida la realidad de las tercerizaciones, las colaboraciones gratuitas o por unos pocos pesos y el subempleo. Si bien este reclamo parte de la prensa gráfica, es necesario remarcar que son problemáticas que afectan a toda la comunicación y se pueden encontrar sin mucha búsqueda tanto en la televisión, en la radio o en la gráfica.
El segundo aspecto clave para la democratización de la comunicación es una ley que regule la gráfica. Recientemente el diputado Jorge Rivas presentó en la Cámara de Diputados un proyecto de ley impulsado por AReCIA, que apunta a que el Estado reconozca y fomente a las revistas y sitios webs culturales, autogestivos e independientes.  AReCIA, que es un espacio integrado por más de 250 medios gráficos, se formó a raíz de las problemática que enfrentan las revistas autogestivas, en cuanto al acceso al financiamiento, la protección de la circulación, en materia impositiva, entre otros puntos. El sector representa una tirada de 350 mil ejemplares mensuales, leídos por un millón y medio de personas y su circulación aporta a la industria gráfica regional aproximadamente 1.750.000 pesos al mes. De esta manera, el proyecto contempla la creación de un fondo equivalente al 20% de la pauta oficial, la protección de los derechos de libre circulación y la desgravación impositiva para el sector.
El aval del proyecto fue firmado por los diputados nacionales Edgardo Depetri, Remo Carlotto, Mara Brawer, Agustín Rossi, Héctor Recalde, Adriana Puiggrós, Carlos Heller, Liliana Ríos, Juan Carlos Junio, María del Carmen Bianchi, Silvina García Larraburu y Omar Plaini.
La autogestión de publicaciones gráficas y de internet es hoy, sin dudas, una de las apuestas más grandes para seguir construyendo y democratizando a la comunicación como una herramienta de cambio. Sin reconocer a los medios alternativos y populares, es imposible efectivizar esta democratización tan buscada. Hay que agregar que este proyecto es una deuda que hay que saldar, como tantas otras, por el perjuicio que sufrió este sector tras décadas de neoliberalismo y de un paradigma cultural y económico que vulneró a la pluralidad de voces, privilegiando la a monopolización –sobre todo de grandes empresas-.


Lanzamiento del Ciclo de Aportes para la profundización de la Comunicación: Lo estratégico de recuperar Papel Prensa

“De la apropiación y el monopolio mediático hacia el desarrollo de medios populares:
 Lo estratégico de recuperar Papel Prensa” 

 En el marco del Ciclo de Aportes para la profundización de la Comunicación, Comunicadores Patria Grande en CONAPLA invita a la charla “De la apropiación y el monopolio mediático hacia el desarrollo de medios populares: Lo estratégico de recuperar Papel Prensa”  
La exposición estará a cargo de Daniel Cecchini, Director periodístico de Miradas al Sur. Coautor de “Silencio por Sangre. La verdadera historia de Papel Prensa, y Jorge Déboli, Secretario de la Comisión Federal Asesora  (creada por ley 26736 para control del papel para diario), Director de la Agencia federal de noticias INFOGEI y Vicepresidente Ejecutivo de la Cámara de Diarios y Periódicos Pymes de la Provincia de Buenos Aires(CADyPBA). La charla se realizará el miércoles 3 de julio a las 17.30 en el aula 11 de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata.

"Durante la última dictadura, los dueños y directivos de los tres diarios más importantes de la Argentina se apropiaron, en complicidad con el Estado terrorista, de la empresa que les permitiría monopolizar la producción del papel de diario.
Esa maniobra de apropiación formó parte de la alianza estratégica entre la dictadura iniciada el 24 de marzo de 1976 y los representantes de los grupos económico-mediáticos más grandes del país.

Se exigía no solo una prensa silenciada mediante la censura, sino medios cómplices de sus políticas y de sus acciones. Esa misión la cumplieron Clarín, La Nación y La Razón y, a cambio de ello, recibieron el monopolio del papel de diario, una suerte de dictadura contra la libertad de expresión.

Monopolio y consecuencias. Con el pacto de sindicación de acciones, las tres empresas periodísticas lograron un control absoluto de Papel Prensa. Ese manejo fue compartido inicialmente, pero cambió en consonancia con las transformaciones ocurridas al interior del grupo, producto de los distintos escalamientos de poder que cada uno de sus integrantes logró hacer.
Esos cambios posibilitaron el manejo hegemónico que tiene Héctor Magnetto sobre la única productora de papel de diario del país. Su gestión no deteriora a La Nación, pero beneficia más a Clarín y perjudica a la empresa como ente societario que debe tener igual cuidado por los intereses de todos sus socios.
Y presiona a los medios periodísticos con sus maniobras en el manejo de cantidades y precios del papel de diario. Por lo pronto, expertos en el sector sostienen que Papel Prensa habría estado subsidiando a Clarín mediante dos formas: un precio de venta de la bobina de papel menor a su costo de producción y la compra de la devolución de diarios a un precio que las fuentes consultadas llamaron insólito.
El calificativo utilizado para aludir al precio de los diarios rechazados por los canillitas que Clarín vende a Papel Prensa, da a entender que está más relacionado con el precio de tapa que con el valor de un diario de descarte.
El grueso del subsidio se origina en el precio del papel. Un estudio de costos y mercado que ha llegado a manos de los directores del Estado Nacional en Papel Prensa, muestra que las empresas editoriales que no accedieron durante los últimos seis años al precio cobrado por esa empresa a Clarín y La Nación, tuvieron que pagar 58 por ciento más caro el papel que necesitaron para sobrevivir. Ese sobreprecio fue la diferencia entre el promedio de los importes abonados por las editoriales obligadas a importar y el costo privilegiado que tuvieron los dos accionistas del monopolio del papel de diario", extraído de la presentación del libro SILENCIO POR SANGRE. LA VERDADERA HISTORIA DE PAPEL PRENSA, de Daniel Cecchini y Jorge Mancinelli.

¿Por qué visibilizar el hecho ahora?
Como trabajadores/as de la comunicación, creemos que la decisión del Estado de avanzar en la expropiación del 24% de PAPEL PRENSA S.A es estratégica, ya que lograría de esta manera controlar mayoritariamente un 51% el directorio de la empresa. Esto genera las condiciones necesarias para potenciar y sustentar el desarrollo de medios comunitarios y populares, que nos permitan tener una comunicación que exprese cada vez más los intereses del pueblo. Y en concreto, sería una oportunidad para avanzar por una Ley de Fomento para la Producción Independiente y Autogestiva de Comunicación Cultural por medios gráficos y de Internet, tal como lo proponen los más de 250 espacios que componen A.R.E.C.I.A. Un pueblo que creció en capacidad crítica y analítica sobre el rol de la comunicación y de los medios masivos en el proceso de debate que nos dejó la consecución de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA). Hoy necesitamos redoblar la apuesta, seguir construyendo lectores críticos y potenciar experiencias comunicacionales que tengan mayor arraigo en la cotidianeidad de los pueblos.
Necesitamos seguir avanzando en mayor impulso para los medios comunitarios y populares. El proyecto de ley que impulsa A.R.E.C.I.A contempla la creación de un fondo equivalente al 20% de la pauta oficial para estos medios, junto con la protección de los derechos de libre circulación y la desgravación impositiva para el sector.
Actualmente las revistas autogestivas representan una tirada de 350 mil ejemplares mensuales, leídos por un millón y medio de personas; y su circulación aporta a la industria gráfica regional aproximadamente 1.750.000 pesos al mes.
Asimismo creemos importante seguir avanzando hacia la plena aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, que desde su vigencia del total de licencias autorizadas el 78,7% corresponde al sector privado y el 21,3% al sector público estatal y no estatal. Cabe destacar que la ley prevé un 33% de licencias para el sector privado, un 33% para el Estado y un 33% para organizaciones sin fines de lucro. Estas últimas son las que más obstáculos tienen, ya que son las principales afectadas por los grandes intereses económicos. Recordemos, el espectro radial y televisivo es finito: en tanto los grandes grupos económicos –que fueron beneficiados durante los procesos más duros del neoliberalismo- no desinviertan lo pautado por la ley, la plena aplicación no podrá efectivizarse.
La lucha es la misma: mientras no haya una disputa en construir legitimidad desde medios que expresen la realidad de las mayorías populares, haciendo énfasis en el empoderamiento de un sujeto crítico que tenga herramientas de análisis y producción de información desde su cotidianeidad, va a resultar muy difícil que los medios masivos desinviertan.
La autogestión de publicaciones gráficas y de internet, junto con las herramientas para garantizar el sustento de los medios alternativos y populares, son hoy una de las apuestas más grandes para seguir construyendo y democratizando a la comunicación como una herramienta de cambio. Sin reconocer a estos medios es imposible efectivizar esta democratización. Esta es una deuda que hay que saldar, como tantas otras, por el perjuicio que sufrió el sector de la comunicación tras décadas de neoliberalismo y de un paradigma cultural y económico que vulneró a la pluralidad de voces, privilegiando a la monopolización de libre mercado. 


Organiza y Convoca

Conapla, Corriente Nacional Popular Latinoamericana
Copla, Agrupación estudiantil
Copagra, Agrupación de graduados y trabajadores de la comunicación Comunicadores Patria Grande
Conventillo Galpón Cultural